Ficha técnica: El conjuro (The conjuring, EE.UU./2013) /
Dirección: James Wan / Guión: Chad Hayes y Carey Hayes / Fotografía: John R.
Leonetti / Música: Joseph Bishara / Edición: Kirk M. Morri / Diseño de
producción: Julie Berghoff / Elenco: Vera Farmiga, Patrick Wilson, Lili Taylor
y Ron Livingston / Distribuidora: Warner Bros / Duración: 112 minutos /
Calificación: apta para mayores de 16 años.
Calificación: Muy
buena
El conjuro no es (ni pretende ser) una película disruptiva,
sino una digna heredera de cierto clasicismo del género donde lo importante no
es la búsqueda desesperada del golpe de efecto, el shock inmediato ni la vuelta
de tuerca inesperada, sino la sabia construcción psicológica de los personajes,
la creación de climas sugerentes y la presentación -sabiamente dosificada- de
los distintos enigmas, claves y elementos (algunos sobrenaturales, por
supuesto) que llevan al espectador a sumergirse e identificarse con la
problemática de los protagonistas.
Demonólogos, cazafantasmas, expertos en fenómenos
paranormales (ella, además, clarividente; él, con contactos directos con la
Iglesia), Ed y Lorraine deberán ocuparse de las desventuras de un matrimonio
(Lili Taylor y Ron Livingston) con cinco hijas en el ámbito de una amplia casa
rural a la que acaban de mudarse (con sótano, claro). Inspirado en hechos
reales, el film desentraña el pasado del lugar y describe la progresiva
irrupción del Mal.
Wan y su impecable elenco no buscan el impacto fácil y
efímero. El conjuro se toma todo el tiempo que necesita para construir la
tensión (un reloj que se detiene, una puerta que golpea, un moretón que se
extiende en el cuerpo o el sonido del viento que entra por una ventana abierta
adquieren dimensiones inusitadas) y, así, consigue un efecto mucho más duradero
en el público. Bienvenido sea, pues, este regreso a las mejores fuentes del
género.
Maximiliano Reimondi
CARLOS BALÁ
Carlitos Balá es el nombre artístico de Carlos Salim Balaá
(Buenos Aires, Argentina, 13 de agosto de 1925)
Infancia y juventud
Carlos Salim Balaá, hijo de un inmigrante libanés y de madre
argentina descendiente de croatas, nació en Buenos Aires el 13 de agosto del
1925, en el Barrio de Chacarita. Su padre fue Mustafá Balaá, a quien en la
niñez, Carlitos ayudaba en una carnicería, negocio con el cual se instaló aquí
Mustafá, oriundo de Beirut, Líbano y su madre, Juana Boglich. Desde pequeño mostró
grandes cualidades de artista y se aparentaba teatros con cajones de manzanas
del comercio de su padre, y recortaba figuras de personas de revistas, para
componer al público y actores.
En sus inicios y a modo de práctica, realizaba monólogos y
hacía chistes a los pasajeros de la línea 39 de colectivos (transporte público
de Buenos Aires), que le permitió relacionarse con el público , venciendo su
timidez y adquirir experiencia.
En su juventud, fue ayudante en el negocio de su padre, y
desde los 18 años se desempeñó como peón de imprenta, repartidor y
administrador. En una fiesta conoció a Martha, quien es la mujer que lo
acompaña hasta el día de hoy. Uno de sus amigos, Isaías, junto con su pareja:
Morena Galé, una vedette de la época, le propusieron a Balá hacer una prueba
para poder actuar, la cual aceptó.
Tras realizar la prueba en Radio Splendid frente a Délfor
Amaranto, lo integró en su equipo y lo reservó en 1955 para La revista
Dislocada, con Jorge Porcel y Mario Sapag, y luego realizó giras por el
interior del país.
Carrera
Tras un desacuerdo con Délfor en 1958, integró un famoso
trío cómico junto a Jorge Marchesini y Alberto Locati y protagonizaron Los
tres..., por Radio El Mundo, con la locución del periodista Antonio Carrizo.
Luego de su éxito, el trío adquirió una gran popularidad y participó en El show
de Andy Russell. Luego protagonizaron ¡Qué plato!, y estuvieron juntos hasta
1960.
Posteriormente de haber celebrado varios éxitos con el
mencionado grupo, cada uno inició su propia carrera de forma individual,
logrando Balá afirmarse sólidamente en el espectáculo, convirtiéndose en una
figura de permanente presencia en los medios, aún hasta el día de la fecha -si
bien con no tanta regularidad- continúa realizando espectáculos y desplegando
un humor sano y muy gracioso, que hace especialmente feliz a los niños y a
quienes -no siendo tan niños- lo recuerdan por sus programas infantiles tan
seguidos en épocas de sus respectivas infancias. Aún hoy sus seguidores ya
grandes, lo siguen y recuerdan permanentemente en el Facebook homenaje, el cual
el mismo lee y sigue.
Comienza a participar en "La Telekermese Musical"
en Canal 7, y también le ofrecieron ser Joe Bazooka y participó en "El
show de Antonio Prieto" y en "El show de Paulette Christian", y
con su personaje de Jacobo Gómez participó en Radio Splendid. En 1962 participa
en "Telecómicos", por Canal 9 y en "Calle Corrientes", por
Canal 7 y también debutó en "El show super 9", con Mirtha Legrand y
Duilio Marzio. En 1963 debutó en la obra teatral "Canuto Cañete,
conscripto del siete", donde se convirtió en uno de los mejores cómicos de
ese año, y por su gran éxito en Canal 9 lo contratan para que conduzca su
propio ciclo "Balamicina". A fines de 1963 filma la película
"Canuto Cañete, conscripto del siete". En 1964 es contratado por
Canal 13 para protagonizar "El soldado Balá", y comienza una larga
carrera televisiva durante la década del 60" y 70": "El
flequillo de Balá", "El clan de Balá", donde actuó junto a
Adolfo Linvel y Blanca del Prado, "Sábados circulares", de Nicolas
Mancera, "Balabasadas", "El circus show de Carlitos Balá",
"El circo mágico de Carlitos Balá", y "El show de Carlitos
Balá".
Su carrera cinematográfica continuó con el gran éxito de
"Canuto Cañete", donde se estrenaron diferentes versiones. Participó
en 18 películas hasta la fecha, entre ellas se encuentran "Canuto Cañete y
los 40 ladrones", "¡Esto es alegría!", "Brigada en
acción", "El tío Disparate", "¡Qué linda es mi
familia!", entre otras.
En 1979 es contratado para protagonizar "El show de
Carlitos Balá", de Enrique Acosta. Trabajando en el intervenido canal
estatal, ATC. Luego realiza varias giras por el interior con el circo. En 1987,
Roberto Fontana lo contrata para participar en "Sábados de la
bondad". Luego es nuevamente convocado por ATC. Ese mismo año regresa
"El show de Carlitos Balá", que gana un Martín Fierro como mejor
programa infantil, en 1988 el programa pasa a Canal 2. Ese mismo año realiza su
última aparición cinematográfica hasta la fecha en "Tres alegres fugitivos",
de Enrique Dawi. En 1990 ATC produce con Carlitos Balá y la troupe de Margarito
Tereré un programa que duró poco tiempo en el aire. En 1995 Carlitos Balá
protagoniza "A jugar con Teddy y Carlitos Balá". Después participa en
ciclos como "Son de diez" y "Como vos y yo", por canal 13.
En los últimos años, Balá ha realizado giras con su circo
por el interior de Argentina. En 2009 acompañó al payaso Piñón Fijo en su show,
y en 2011 participó junto a la ex-vedette (luego devenida en conductora
infantil) Laura Franco en el espectáculo "Panam y Circo" como
invitado especial.
Gags
Su marca registrada es su flequillo, y sus "frases
celebérrimas" (muy pegadizas), que él repite en gags:
P: ¿Qué gusto tiene la sal? R: Salado.
Ea-ea-ea pe-pé
P: y, diga me... R: meeeee (imitando el sonido de una oveja)
Sumbudrule -conocido por algunos como Sucutrule- (mientras
inadvertidamente colocaba su mano por detrás de la nuca de sus oponentes como
una araña, en señal de burla o disgusto, aunque sin posarla sobre su cabeza).
P: El chupete es... R: "Feo" (diálogo con los
niños que asistían a su programa, que ayudó a muchos progenitores y niños a que
estos últimos dejaran el chupete).
"¡Mirá cómo tiemblo!" (ante un enemigo que en
realidad era temible, extendía sus brazos hacia adelante y agitaba sus manos
como si fueran dos banderas agitadas fuertemente por el viento).
¿Mamá, cuándo nos vamo' ? (caracterizado como niño,
indicando aburrimiento, a la actriz que personificaba a su "madre").
"¿Un gestito de idea?"
Fabulósico y palabras de forma similar terminadas en
"ósico" o en general esdrújulas inventadas a partir de palabras
graves.
"Está un kilo y dos pancitos".
"Más rápido que un bombero".
"Seriola (modo de afirmación irónica inventado por él
mismo) con techito por si llueve".
"Zazaza zazaza" (forma de reírse en vez de Jajaja
jajaja).
"Te pasaste, Petronilo, pegá la vuelta",
habitualmente seguida por "La Argentina te queda chica, comprá dos números
más".
"Señoras, señores y por qué no lactántricos
(deformación de la palabra "lactantes"), tengan ustedes muy buena
imagen" (La frase incluye una versión específica de la creación de
neologismos esdrújulos).
"Ya mismo y sin cambiar de andén".
P: Ta-ta Ta-ta-tá R: "Ba-lá"
Quédese tranquilo y duerma sin frazada.
Riñones (mientras con el índice se tocaba la cabeza).
¡Qué lindo!... (mientras inclinaba la cabeza).
Pero escucheme una situación señor (cuando discute con
alguien y quiere explicarse).
¡Pero ves que no se puede dar confianza!
En la TV, Carlitos tenía un amigo invisible: el perrito Angueto,
con quien desarrollaba un sketch en el que el perro supuestamente lo arrastraba
a su antojo. El perro invisible era simbolizado con un círculo rígido unido a
una vara que representaban collar y correa de un perro, y Balá llevaba este
conjunto apuntando hacia adelante y a unos 25 cm del suelo para
representar caminando al supuesto perro, y además hacía como que lo acariciaba
o cargaba o como si interactuara con un perro, que solamente él veía. Hizo
también famosas bromas telefónicas, el trío acrobático Los Malerva, El
Indeciso, Petronilo —el paisano ingenuo que tras ser engañado por un estafador
callejero y aún creyéndose beneficiado por la fortuna remataba:
"Petronilo, la Argentina te queda chica, pedí dos números más"—, El
mago Mersoni (al que los trucos siempre le salían mal) y Don Generoso, un
estereotipado judío del barrio de Once que preguntaba el precio de algún
artículo diciendo: "¿cuánto doile?".
Maximiliano Reimondi
Alfredo Lorenzo Palacios
Alfredo Lorenzo Palacios (Buenos Aires, 10 de agosto de 1880
- 20 de abril de 1965)
Nació en Buenos Aires en 1880 (aunque algunos autores dicen
que nació en 1878, ya que no hubiera podido ser diputado nacional porque no
alcanzaba la edad constitucional de 25 años cuando fue elegido por primera
vez). Fue uno de los políticos con mayor influencia en la Argentina del siglo
XX junto a Juan Domingo Perón e Hipólito Yrigoyen. Si bien se opuso a ambos
presidentes, fue con Perón con quien mayor discrepancia tuvo, ya que lo
denominaba "fascista".
Fue su padre el abogado y periodista uruguayo Aurelio
Palacios. Se educó en la fe cristiana que, luego de algunas desilusiones,
abandonó. El ambiente de la época, las obras de los grandes teóricos del
socialismo como Karl Marx y Friedrich Engels y su percepción de lo argentino y
latinoamericano serán los basamentos de su formación y visión de la política
que lo guiará toda su vida y accionar.
Carrera política
Recibido de abogado en la Facultad de Derecho de la
Universidad de Buenos Aires, esboza una tesis denominada "La miseria"
la cual es rechazada por los hombres de la época: la misma debió ser
reemplazada por una tesis sobre quiebras de empresas. En su chapa de abogado
establecía: "Dr. Alfredo Lorenzo Palacios atiende gratis a los
pobres".
Su figuración en el socialismo se da por los discursos en
mítines en los que intervenía y después de varias idas y venidas se afilia al
Partido Socialista en el Centro de La Plata.
El legislador[editar · editar fuente]
Se incorporó al Partido Socialista creado por Juan B. Justo
en 1896. Triunfó en las elecciones para diputados nacionales del 13 de marzo de
1904, por el distrito de La Boca, reconociéndose como el primer legislador
socialista de América Latina. Fue autor de gran parte de la legislación laboral
argentina y del libro El Nuevo Derecho. Inspiró la Reforma Universitaria de
1918 y fue designado por el Congreso de Estudiantes Latinoamericanos como
Maestro de América.
Para las elecciones que se harían en el año 1904, un grupo
de inmigrantes italianos del barrio de La Boca llegan al despacho de abogado
del Dr. Palacios y le ofrecen la candidatura a Diputado Nacional por el Partido
Socialista por la circunscripción 4º. La campaña fue febril, casa por casa, conventillo
por conventillo: Palacios se detenía en los patios y daba sus discursos en
castellano e italiano y un interpréte lo traducía al xeneize (genovés). El 13
de marzo de 1904, ante una elección en donde dominaba en el resto de la ciudad
un clima de fraude de los partidos del régimen, Alfredo Palacios se alzaba con
830 votos que a viva voz no se dejaban sobornar por los políticos de la
oligarquía y triunfaba.
Fundador del Nuevo Derecho, el derecho de los trabajadores,
Alfredo Palacios arranca de esa oligarquía varias leyes sociales entre ellas la
de sábado inglés, descanso dominical, aumentos de sueldos, que el pago de
sueldos se haga en moneda y no en vales, ley de accidente laboral, ley del
trabajo femenino, ley de la silla, estatuto del docente y muchas otras leyes
que en distintos períodos fue presentando y logrando que se sancionen.
Su tarea, ya sea como diputado o senador siempre estuvo
orientada a los trabajadores, las mujeres, los niños, los ancianos y los
jóvenes. También adhirió al movimiento de la Reforma Universitaria que estalló
en la ciudad de Córdoba el 15 de agosto de 1918.
Abogado, político, profesor universitario, en cualquiera de
estos roles siempre defendió con la misma convicción y vehemencia los valores
de la igualdad, la libertad y la solidaridad social. Su visión nacionalista del
socialismo le valió muchas veces el reconocimiento de que fue él quien
introduce el debate de la nacionalidad y de una visión nacional dentro de su
partido. Fue quien pregonó que en las marchas el Partido Socialista marche con
banderas rojas pero también con banderas argentinas.
Entre sus obras más importantes se encuentran El nuevo
derecho, Esteban Echeverría: albacea del pensamiento de Mayo, La miseria, El
dolor argentino y cientos de conferencias y escritos varios. Fue el primer
diputado socialista que lleva al seno del congreso la temática de la mujer y el
voto femenino por el que venían luchando feministas como Alicia Moreau de
Justo, Elvira Rawson, Carolina Muzzili, Fenia Chertkoff y otras.
Mandatos interrumpidos
Alfredo Palacios en la Asamblea Constituyente del año 1957
realizada en Santa Fe.
Alfredo Lorenzo Palacios nunca pudo concluir un mandato ya
sea por los golpes de estado o por otras circunstancias como la clausura del
Congreso por parte del presidente José Figueroa Alcorta en 1908, diez días
antes de finalizar su mandato. En el año 1915, por renuncia de este a la banca
de diputado luego de ser expulsado del Partido Socialista por batirse a duelo
(cosa que estaba prohibida en sus estatutos). En el año 1928 volvería al
Partido Socialista para luego ser elegido senador nacional en 1931. Fue elegido
nuevamente en 1935, pero su mandato es interrumpido por el golpe de estado del
4 de junio de 1943 que derrocó al presidente Ramón Castillo. Durante el gobierno
de Perón estuvo encarcelado sin proceso, al igual que otros dirigentes
opositores, tras el fallido golpe de estado del general Benjamín Menéndez en
septiembre de 1951. Su nuevo mandato de senador nacional es interrumpido por el
golpe de estado de 1962 que derroca al Presidente Arturo Frondizi. Por último
su mandato de diputado nacional también es interrumpido por su fallecimiento,
el mandato fue acortado pero pese a ello 10 días antes de cumplir el mismo
falleció el 20 de abril de 1965.
Profesor
Fue profesor de la Universidad de Buenos Aires y rector de
la Universidad Nacional de La Plata, fundador de la materia de Derecho del
Trabajo y de la Seguridad Social de la Facultad de Ciencias Económicas de la
cual el era su titular de cátedra.
Fue Convencional Constituyente en los años 1956 y 1957 e
impulsor del Art. 14 Bis. También fue candidato presidencial en el año 1958 con
la fórmula Alfredo Palacios - Carlos Sánchez Viamonte. Por aquel entonces la
Revolución cubana era el ideal de muchos sectores y el socialismo argentino la
vio con suma simpatía, a tal punto que el lema de la campaña presidencial era
"en Cuba los barbudos, en Argentina los bigotudos...vote vote vote vótelo
a bigote". Luego, cuando la Revolución Cubana se adhiere al bloque
soviético, Palacios critica esta decisión porque siempre concibió incompatible
la realización del socialismo sin libertad.
Fallecimiento
El legislador socialista brindó un discurso en donde
denunciaba aspectos negativos del gobierno peronista. Aquí, un pequeño fragmento
del mismo.
Su austeridad le valió una vida de grandes privaciones en
sus últimos años y falleció en absoluta pobreza. Su casa, ubicada en la calle
Charcas 4741 (en Buenos Aires), estuvo a punto de ser rematada varias veces y
solo por la intervención de amigos pudo ser salvada. Hoy funciona allí la
Fundación Alfredo Lorenzo Palacios, la que conserva algunos de sus muebles y su
enorme biblioteca.
Sus restos descansan en el Cementerio de la Recoleta.
Maximiliano Reimondi
lunes, 5 de agosto de 2013
LITERATURA
Rayuela cumplió 50 años
Un 28 de junio de 1963 se editaba por primera vez una de las
obras fundamentales de la lengua hispana: Rayuela , de Julio Cortázar. El
aniversario número 50 fue acompañado de distintas actividades, homenajes y
reediciones. Se cumple medio siglo de un libro distinto que abreva en la
escritura experimental y que puede abordarse de diferentes maneras por parte
del lector.
Alfaguara, la editorial que posee los derechos de la obra,
ha publicado una edición conmemorativa limitada, que incluye un apéndice con
textos donde Cortázar cuenta la historia de la novela. Según Alfaguara, esta
reedición de Rayuela ya es uno los libros más vendidos en librerías, lo cual
demuestra el interés de los lectores, que se renuevan generación tras
generación.
¿De qué están hechas las letras de Rayuela?
Son letras líquidas, de vodka barato y Pernod, letras que no
solo sirven al propósito de reconstruir el París de los años 60, sino que se
deben a ese mismo imaginario y lo que contienen, en cada palabra de la obra del
argentino –que es más bien belga, pues nació mientras su padre trabajaba en la
embajada argentina en dicho país– resuenan ecos de licor, cigarro y poesía,
pero, sobre todo, resuenan acordes de jazz.
¿Por qué jazz? En primer lugar Cortázar era un melómano
consumado –con una predilección especial hacia el género de los saxofones–, de
hecho su obra está plagada de guiños a este estilo de música. Su cuento El
perseguidor, en el que realiza un retrato muy aproximado del jazzista
norteamericano Charlie Parker, es uno de los mejores ejemplos. En segundo
lugar, y quizás lo más importante, solo el jazz es capaz de cobijar el espíritu
de las letras de Rayuela entre sus notas.
Patricio Goyalde, doctor en filología hispánica y director
de la comisión gestora del Centro Superior de Música del País Vasco, en España,
ilustra esta relación. “Cortázar siente una gran admiración por el género y el
carácter de improvisación que en él ve reflejado, de hecho trata de trasladar
este estilo de hacer música a su estilo de escritura”.
Estilo de escritura que en Rayuela encuentra el mejor
escenario para su sublimación, a un compás casi dadaísta. Para Goyalde, la
novela insigne del escritor argentino juega en el lindero de la escritura
automática. “Para Cortázar, el proceso de escritura no se puede concebir sin un
riesgo en la ejecución, sin ese margen de peligro que implica la aceptación de
su posible imperfección, que a su vez es la condición para la conquista de los
momentos absolutos”.
“El jazz es como un pájaro que migra o emigra o inmigra o
transmigra, algo que corre y se difunde... es la lluvia y el pan y la sal”, son
los pensamientos de Oliveira, entre el trance y la consciencia, desparramado
sobre la alfombra de un cuarto en el barrio latino de París, sede del club de
la serpiente, la voz de Ma’ Rainey, interpretando Jelly Bean Blues, inunda el
aire. Del capítulo 10 al 20, Rayuela es un decálogo de jazzistas clásicos,
prueba no solo de la importancia del mismo en la novela, sino también de los
amplios conocimientos de Cortázar del mundo musical.
Maximiliano Reimondi
ARTE
LEÓN FERRARI
León Ferrari (Buenos Aires, 3 de septiembre de 1920 -
ibídem, 25 de julio de 2013)
Biografía
León Ferrari nació en Buenos Aires en 1920, hijo de Susana
Celia del Pardo y Augusto César Ferrari.
En 1946 comenzó a pintar retratos y a dibujar cuadros de
flores, nunca cursó formalmente la carrera de Bellas Artes. Obtuvo el grado de
Ingeniero en la Universidad de Buenos Aires en 1947. A partir de 1952
vivió junto a su familia en Italia.6 donde inició su producción artística como
escultor.
En 1955 regresó a Buenos Aires y durante algunos años se
dedicó a su profesión de ingeniero. En 1962 regresó a Italia y alquiló un
taller en Milán. Allí comienza sus dibujos abstractos, ilustra poemas de Rafael
Alberti y comienza a mezclar textos con dibujos. A partir de 1963 comienza a
realizar collages con fotos y reproducciones de imágenes religiosas, y a
participar en exposiciones internacionales.8
En 1976 se exilió en San Pablo debido a la dictadura militar
en Argentina.4
En 1982 viajó a la Argentina, y regresó definitivamente en
1991. En 1995 obtuvo la beca Guggenheim.6 En 2006 fue invitado especial en la
Bienal San Pablo.
En 2007, su obra más reconocida, La Civilización Occidental
y Cristiana, creada en 1965, ganó el León de Oro en la 52º Bienal de Venecia.
En 2009 el MoMA exhibió una retrospectiva de su obra que se
presentó luego en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, de Madrid.
En 2012 recibió el Premio Konex de Brillante al artista más
destacado de la década en la Argentina y el de Platino en la disciplina Arte
Conceptual: Quinquenio 2002 - 2006. También obtuvo un Premio Konex Diploma al
Mérito en 1992 y 2002.
El 25 de marzo de 2012, al cumplirse 35 años del secuestro,
asesinato y desaparición de Rodolfo Walsh, el Espacio Memoria y Derechos Humanos
inauguró la instalación artística "Carta Abierta a la Junta Militar”, a
partir de una idea de León Ferrari. La obra, que quedó montada en el “Bosque de
Eucaliptos”, frente al Casino de Oficiales de la ex ESMA, consiste en una
instalación de catorce paneles de vidrio con la transcripción completa de la
Carta Abierta de Walsh.
Falleció en Buenos Aires el 25 de julio de 2013, a los 92 años.
Obra
"La civilización occidental y cristiana" (1965)
Obra de León Ferrari. Reproducción de un bombardero norteamericano con un
Cristo de santería.
La obra de León Ferrari fue objeto de polémica y
controversia, sus trabajos, realizados en collages, pinturas, esculturas
sonoras, tallas y modelados en materiales diversos y ensamblajes, se centran en
conceptos de denuncia y crítica social donde la guerra, la religión, el poder y
el sexo ocupan un lugar destacado. Su fuerte crítica a la Iglesia Católica
causó gran controversia en la Argentina, generando un intenso debate sobre arte
y libertad de expresión en el que estuvo involucrado el Papa Francisco I, Jorge
Bergoglio, en aquel momento Arzobispo de Buenos Aires.
Cronología de sus
obras más importantes
1962: Escrituras Deformadas.
1964: El árbol embarazador.
1965: La civilización occidental y cristiana
1965: Manos, presentada en la exposición Surrealismos en
Argentina.
Maximiliano Reimondi
MÚSICA
Walter Malosetti
Walter Malosetti, nombre esencial del jazz argentino al que
aportó el toque virtuoso de su guitarra, una trayectoria de más de seis décadas
y una comprometida labor formadora, falleció el pasado 29 de julio, a los 82
años.
Walter nació el 3 de junio de 1931 en Córdoba, fue discípulo
de Irma Costanzo y egresó de la academia de guitarra Gascón y en su vasto
recorrido musical debe citarse su presencia en Swing 39, conjunto con el que
registró varios álbumes y que junto la Orquesta Sinfónica Mayo actuó en el
Teatro Colón.
En solitario, puso su guitarra al servicio de álbumes y
conciertos de Oscar Alemán, Hernán Oliva, el “Gato” Barbieri, Baby López Furst,
Enrique “Mono” Villegas, Roberto “Fats” Fernández, Lalo Schiffrin, Joe Pass y
Jim Hall.
Como una postal de ese tránsito puede apreciarse el
documental "Sólo de guitarra", de Daniel Gagliano, que aborda la vida
y la obra del artista en video digital con un prólogo en 16 milímetros.
"El jazz, al igual que la música clásica, maneja sus propios
tiempos, tiende a la cultura, y eso molesta un poco"
Walter Malosetti, en una entrevista a Télam en 1995 La película estructurada como un álbum
musical, cuenta con testimonios del contrabajista Héctor González, el bajista
Javier Malosetti -su hijo-, el percusionista Norberto Minichillo y el
bandoneonista Dino Saluzzi.
Maestro, docente, investigador y difusor del jazz en la
Argentina, Malosetti no dudaba en emparentar al género que amaba con la música
clásica.
"El jazz, al igual que la música clásica, maneja sus
propios tiempos, tiende a la cultura, y eso molesta un poco. Es marginal en
todo el mundo porque lo que se difunde es la música `sanata`", afirmó
Walter a Télam en una entrevista de enero de 1995.
Entonces y a cuento del exquisito disco de tributo a Django
Reinhardt, señaló que "quería hacer este homenaje desde mi lugar. No puedo
hacerme el Django porque no toco como él. Yo toco un poquito Charlie, un
poquito Django y un poquito Oscar Alemán. Estoy influenciado por todo lo que
aprendí y escuché".
En el mismo sentido, añadió que "los grandes
guitarristas que nos formaron a nosotros son Django, en la onda acústica y
gitana europea, y el norteamericano Charlie Christian, el violero negro de la
época del swing que murió a los 23 años, pero marcó una época".
En otra definición con su sello, Malosetti indicó que
"no me importa vender mucho. A los músicos de jazz no nos conoce nadie,
pero somos sinceros y no queremos comprar a la gente".
Parte de ese legado estético y ético, Walter lo trasladó a
los jóvenes que formó en el Estudio de Música (que fundó en 1961) y en otros
ámbitos educativos y también en los libros que desde "Bases de
improvisación para guitarra", publicó a partir de 1975.
En 2001, en ocasión de presentar el disco "Grama",
cuyo título reunía las primeras sílabas de Graciela Malosetti, su esposa
recientemente fallecida, celebraba "que se está recogiendo una semilla que
sembramos en los 70 y la buena influencia que produjo Miles Davis al fusionar
jazz y rock, y que logró que los que entraron en el jazz ya no pudieran salirse
más de esa onda artística".
Para Malosetti, esa escuela ligada al uso de la síncopa y la
improvisación, "logró que la gente pueda ir comprendiendo lenguajes que
antes, aún en sus formas más accesibles como las que abordaba Louis Armstrong,
no se entendían", precisó.
Convencido del valor de la música del jazz, el creador
consideró que "el jazz ayuda a comprender a las demás músicas populares
que son buenas" y dijo que "el jazz es como un condimento que le
viene bien a todas las músicas porque hace un culto de la apertura y el buen
gusto".
Maximiliano Reimondi
viernes, 2 de agosto de 2013
LA
EDUCACIÓN EN ARGENTINA
Las cifras
oficiales del Ministerio de Educación de Argentina son alarmantes. La mitad de
los adolescentes no termina el secundario y de la otra mitad, el 20 %, no
comprende lo que lee y no tiene los conocimientos básicos de ciencias y
matemáticas. Según los especialistas, en la ley de educación promulgada en 2006
se perdió calidad educativa. Dicha ley tiene como principal objetivo fijar la
calidad educativa, que incluye lograr que los jóvenes a los 18 años de edad
egresen con 13 años de enseñanza obligatoria. Si observamos esto en la
provincia de Santa Fe, la situación se agrava ya que el Ministerio se encargó,
en los últimos 6 años, de destruir la currícula escolar.
Los datos
oficiales indican que el 56% de esos adolescentes y jóvenes no egresa del nivel
secundario en tiempo y forma, y se aproxima a la situación del 44% restante a
través del prisma de una prueba de calidad nacional y otra internacional. Todo
indica que el 70% de los jóvenes en Argentina tiene grandes falencias de
aprendizaje.
El
Operativo Nacional de Evaluación (ONE), examen que hace el Ministerio de
Educación de la Nación a los alumnos del último año del secundario, indica que
en promedio un 30% de los alumnos califica en rendimiento bajo; 16%, alto, y
53%, medio.
En tanto,
el examen internacional Pisa, que se hace cada tres años a chicos de 15 años de
edad desde 2000 y pone a prueba sus conocimientos en ciencias, matemáticas y
comprensión lectora, indica que el 52% de los alumnos argentinos no comprende
lo que lee ni alcanza las habilidades mínimas en ciencias ni en matemáticas.
Actualmente,
la escuela pública es sinónimo de paros políticos amparados en un justo reclamo
salarial docente. Es el gobierno nacional y provincial que deben ser
responsables de pagar salarios adecuados para que el cuerpo docente sea
valorizado en su profesión. Este año, los gobernantes y muchos docentes, con
sus chicanas políticas lograron estigmatizar la educación pública. Los
estudiantes fueron las únicas víctimas de luchas políticas absurdas que los
llevaron a perder días de clases. La consecuencia es que los padres opten por
que sus hijos vayan a escuelas privadas y se aseguren los días de clases.
Cuando se
hable de un proyecto nacional y popular, que se implemente realmente y no se
mienta. El sistema educativo argentino está en crisis. No basta con regalar
netbooks en las escuelas. Un plan inteligente es tener profesionales de alta
capacitación, con sueldos excelentes y jóvenes que se den cuenta que el estudio
secundario es la base para ir a la Universidad y forjar su futuro.