domingo, 19 de agosto de 2012


Cartas Marcadas
de Alejandro Dolina
Editorial: Planeta

Sinopsis:
"Cartas marcadas es un libro envuelto en niebla. La cerrazón que cubre las calles de Flores se tiende también sobre los capítulos de la novela provocando confusiones y obligándonos a marchar despacio. Por otra parte, la acción perversa de los Conspira dores ha llenado el texto de tachaduras, episodios falsos y agregados fraudulentos, para no hablar de páginas y capítulos enteros que han sido robados. La niebla no sólo dificulta la percepción, sino que tiene, como los vapores oraculares, un efecto alucinatorio. Vemos poco y lo poco que vemos es dudoso. Los muertos se pasean por el barrio, las pasadillas se hacen realidad y los sujetos se vuelven inconstantes. El lector anda a tientas entre personajes que tratan de ocultar un secreto. El humo le inspira al principio una fe poética que lo convence de que debe dejarse guiar por las intuiciones del amor y del arte. Hasta que comprende, en medio de la oscuridad, que las manos de Virgilio y Beatriz que han venido orientándolo, no son más que otro engaño, el más perfecto, de un universo que es ausencia pura."

Alejandro Dolina nació en Baigorrita y se crió en Caseros. Realizó estudios de Derecho, Música, Letras e Historia. Ha compuesto numerosas canciones y ha integrado distintos grupos de música argentina y latinoamericana como director y arreglador.
En la Argentina y en el Uruguay, sus libros han alcanzado una extraordinaria
difusión: Crónicas del Ángel Gris (1988, y 1996 edición corregida y aumentada), El libro del fantasma (1999) y Radiocine (2002, una recopilación de historias musicales escritas para la radio). Es autor de las comedias musicales Teatro de Medianoche, que protagonizó él mismo como actor y cantante y El barrio del Ángel Gris, que obtuvo el premio Argentores en 1990.
El guión cinematográfico de esta obra obtuvo el Premio Coral en el Festival Cinematográfico de La Habana. En 1998 grabó su opereta Lo que me costó el amor de Laura. En esa grabación representaron los papeles de la obra Joan Manuel Serrat, Mercedes Sosa, Ernesto Sabato, Les Luthiers, Horacio Ferrer, Sandro, Julia Zenko, Juan Carlos Baglietto y muchos otros artistas, acompañados por la Orquesta Sinfónica Nacional. En 2000 fue llevada al teatro y obtuvo el premio Argentores a la mejor obra del año.
Durante el año 2003 realizó el ciclo televisivo Bar del infierno, con relatos, tangos y canciones compuestas especialmente para el programa; el desarrollo literario de este libro con el mismo nombre es absolutamente independiente. En
2004 se editó el disco "Tangos del Bar del Infierno" y se representó el espectáculo teatral Bar del Infierno, a partir de la misma temática.
Su programa de radio La venganza será terrible se mantiene desde hace quince años al frente de las mediciones de audiencia de la medianoche.

Cartas marcadas es el cuarto libro y la primera novela de Alejandro Dolina, publicado en 2012 por Editorial Planeta. El título proviene de una canción del propio Dolina que incluyó en Radiocine. La acción transcurre, como en sus libros anteriores, en el barrio porteño de Flores, esta vez cubierto por una extraña niebla. Dolina trabajó en esta obra en los últimos años. En entrevistas, atribuyó la demora de su publicación a su "incompetencia". En 2008, el autor explicaba:
“Quiero contar una historia, pero dejar entrever una mirada escéptica o dudosa o ajena, que ponga en tela de juicio los métodos que se están utilizando para el mismo relato. Que se entre y se salga de la historia. Armé el relato alrededor del barrio de Flores nuevamente. Pero también hay un montón de lugares donde ocurren episodios anexos.(...) me pareció que debía tener unos recursos formales y casi de diseño que contribuyeran a que el lector no tuviera tanta fe en la historia”.
En la primera semana de su aparición se colocó al tope de la lista de los libros más vendidos de la Argentina, según los datos aportados por el Grupo ILHSA.

Calificación: Muy bueno

Por Maximiliano Reimondi

Este libro de Dolina, en medio de aventuras épicas y románticas, nos atraviesa la razón con  pasajes de suspenso y acción y erupciones inesperadas de profundidad filosófica y fina poesía.
Hay un ambiente borgeano en este libro envuelto en una niebla espesa, en la que no se distinguen cuerpos ni almas y donde las sombras danzan y las identidades y las historias se mezclan.
El libro de Raziel, que aparece y desaparece y es escrito, tachado, quemado y reescrito por sucesivas generaciones, es el que dicta de alguna manera el destino de los personajes de Cartas marcadas. Ese concepto de libro mágico, consultado y modificado por conscientes o casuales demiurgos, es una seña de identidad borgeana.
Dolina lo complementa con esa vocación irreprimible por intercalar un coro que entona “una vieja fue a cagar/en el medio de la vía” a pocas páginas de un poema en el que Alá recorre, para distraerse, los pasillos del mundo de lo que no sucedió.
Se mezcla la voz del barrio y esa obsesión por lo erótico que lo han hecho famoso. Y también ese cinismo menos moderado por la perplejidad intelectual y por la precisión de lenguaje que tiene el autor de El Aleph. Lo de Dolina es un canto a la literatura. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario